Compare el sartén de uso regular en su hogar con la última generación recubierta de cerámica antiadherente.
Se dará cuenta inmediatamente de los beneficios en la experiencia de cocción sobre cerámica cuando la comida se ve mejor, se calienta uniformemente, y la limpieza posterior se logra en un bostezo. Pero, en contraste: ¿Qué ocurre en una organización que intenta identificar a donde esta ubicada en términos de análisis de datos?
Disperse el pensamiento por un momento de lo técnico, y veamos aquellos males que no distinguen de posición ni rango.
Estancamiento
Existe un gran desconocimiento sobre lo que es posible alcanzar con la analítica moderna. Nos enfocamos enormemente en mejorar lo físico, aquello tangible que podemos comparar fácilmente como si fuesen un par de zapatos; ir hacia adentro requiere de muchísimo esfuerzo.
En ocasiones, ni siquiera es posible hacerlo porque el conocimiento actual es resultado de personas que en su ir y venir, han aportado su intelecto definiendo lo que en el presente se considera una practica estándar en la organización. No es algo que vive, ni transmuta en su día a día, sino que se convirtió en la replica del como nosotros lo hemos venido haciendo.
En otras palabras: ha dejado de crecer el pensamiento analítico.
Irrupción en medio de lo cotidiano
Para levantar cabeza, lo más probable es que se deba meter el dedo en la llaga. Y el mayor engaño es el siguiente: usted y su equipo alcanzan las metas y los objetivos previstos con el conocimiento y la infraestructura analítica disponible.
¿Por qué preocuparnos en querer cambiar algo que funciona bien?
Allí es donde un benchmark o comparación analítica entra en escena.
Comparación
Una compañía que haya trasladado parte de sus análisis a plataformas de analítica moderna puede:
- Conseguir en menos de 60 segundos el estado de cualquier Indicador Clave de Rendimiento (KPI)
- Acceder a todos los análisis bajo distintos medios de consumo electrónicos
- No dependen de terceros para consultar resultados de carácter estratégico
- Trabajar con datos certificados para soportar decisiones de peso
- Elevar la profundidad y complejidad de los análisis
- Combinar lo mejor de la Inteligencia Artificial sin la necesidad de programar una sola línea de código
- Analizar todo, absolutamente todo lo necesario; nada de pequeñas porciones
- Agilidad en las comunicaciones
Se leen ocho (8), pero son suficientes para generar un cambio tan transcendental en la cultura analítica de una compañía, que si alguna vez te preguntan: ¿Qué te parece si apagamos el modelo analítico por una semana?, te darás cuenta del terror de no tenerlo cuando es parte de la transformación digital en la manera de analizar y procesar datos.
Y cuando veas a la competencia; no la mires solo por fuera (lo físico). Mírala e investígala por dentro, pero principalmente en la manera de analizar datos.